Los siete vicios capitales y sus remedios. I La soberbia.
Posted by: Lotario de Segni
(I) La soberbia
La soberbia u orgullo es el desordenado amor de la propia excelencia. Según los casos se llamará ambición, vanagloria, amor propio, egoísmo, etc. La soberbia nos hace duros y crueles para con los inferiores; desprecia a los iguales; soporta a regañadientes a la autoridad, o la adula rastreramente.
El que se deja dominar por el orgullo es capaz de cometer cualquier maldad: “el comienzo de todo pecado es la soberbia” (Ecli 10, 15). Este vicio es el primero, así cronológica como lógicamente. A él está expuesto tanto el niño como el anciano, el asceta no menos que el infiel, y aún los mismos Santos no pueden librarse de sus asaltos.
El orgullo pide, pues, ser combatido siempre y en todos los hombres. De un modo especial han de luchar: contra la ambición, los temperamentos biliosos; contra la jactancia, los sanguíneos; contra la vanidad y susceptibilidad, los nerviosos. En el temperamento melancólico el orgullo degenera fácilmente en crueldad y tiranía.
Remedios:
1) conocimiento de sí mismo, de los propios defectos así públicos como secretos, del verdadero valor que uno tiene a los ojos de Dios.
2) pensar que Dios aborrece este vicio con preferencia de los demás.
3) pensar en los peligros que entraña este vicio, en especial el endurecimiento del corazón y la impureza.
4) practicar la virtud opuesta (la humildad), en especial en el trato con los demás.
Fuente: R.P. Víctor Lithard C.S.Sp., Curso de teología pastoral, Editorial Litúrgica Española, 1933