Los siete vicios capitales y sus remedios. III La lujuria

Posted by: Lotario de Segni

Sexto Mandamiento 01 (01)

(III) La lujuria

La lujuria consiste en el desordenado apetito de los placeres que el Creador reservó al deber de propagar la especie.
Puede presentarse en diversos grados y de distintas maneras: en el
pensamiento o en la imaginación, mediante complacencias pecaminosas; en el apetito, mediante deseos voluntariamente excitados o simplemente admitidos; en las acciones, mediante palabras u obras.

La malicia de la lujuria directamente excitada o simplemente consentida es grave
ex toto genere suo (siempre). Indirectamente ofrece este vicio serios peligros, a causa de la resbaladiza pendiente que halla en nuestra debilidad. Esta propensión natural es alimentada en nosotros por las curiosidades malsanas, y, fuera de nosotros, por una espantosa profusión de recursos.

Remedios:
1) ante todo conviene saber que la naturaleza no está suficientemente pertrechada contra dicho vicio, debiendo en consecuencia desconfiar de sí misma.
2) el natural temor de las graves y bochornosas consecuencias de este vicio: precipitación en el entendimiento, egoísmo, aversión a las cosas espirituales (incluso al mismo Dios), desesperado apego a la tierra, desorden, caducidad y vergüenza en al cuerpo, etc.
3) la gracia, prometida a la oración y a la humildad.
4) fuga de las ocasiones peligrosas (imágenes, lecturas, tratos peligrosos, etc.)
5) moderación en el uso de los sentidos, especialmente la vista y el tacto.
6) guerra a la ociosidad y mortificación del cuerpo.
7) dirigir la atención hacia otras cosas cuando aparece la tentación, sobre todo mediante el uso de jaculatorias.
8) devoción filial a la Santísima Virgen.
9) la frecuencia a los santos sacramentos.

Fuente: R.P. Víctor Lithard C.S.Sp., Curso de teología pastoral, Editorial Litúrgica Española, 1933