Gracia de Dios

Imitación de Cristo (VI)

Posted by: Corim

San Francisco de Borja 01 (02b)
San Francisco de Borja ante el cadáver de la Emperatriz Isabel de Portugal

Vano es el que pone su esperanza en los hombres o en las criaturas. No te avergüences de servir a otros por amor de Jesucristo y parecer pobre en este mundo. No confíes de ti mismo, mas pon tu parte y Dios favorecerá tu buena voluntad. No confíes en tu ciencia, ni en la astucia de ningún viviente, sino en la gracia de Dios, que ayuda a los humildes y abate a los presuntuosos.

Si tienes riquezas no te gloríes de ellas, ni en los amigos, aunque sean poderosos; sino en Dios que todo lo da, y sobretodo desea darse a sí mismo. No te alucines por la lozanía y hermosa disposición de tu cuerpo, que con una pequeña enfermedad se destruye y afea. No tomes contentamiento de tu habilidad o ingenio, porque no desagrades a Dios, de quién proviene todo bien natural que poseyeres.

No te estimes por mejor que los demás, porque no seas quizá tenido por peor delante de Dios, que sabe lo que hay en el hombre. No te ensoberbezcas de tus obras buenas, porque son muy distintos los juicios de Dios de los de los hombres, al cual muchas veces desagrada lo que a ellos contenta.
Si algo bueno hay en ti piensa que son mejores los otros, pues así conservarás la humildad. No te daña si te pospones a los demás, pero es muy dañoso si te antepones a uno solo. Continua paz tiene el humilde; más en el corazón del soberbio hay emulación y saña muchas veces.

Fuente: Tomás de Kempis, De la Imitación de Cristo y menosprecio del mundo, libro I, cap. VII, Editorial LUMEN

San Agustín, la Omnipotencia de la gracia

Posted by: Juan Sobiesky

San Agustín 03 (00)
El Triunfo de San Agustín

Porque es sobrenatural, porque Dios -dueño soberano de sus designios y de sus dones- la ha colocado muy por encima de las exigencias y de los derechos de toda naturaleza creada, la santidad a la que somos llamados es inaccesible sin la ayuda de la gracia divina. Harto claramente nos lo ha dicho nuestro Señor: «Sin mí nada podéis hacer». Y observa San Agustín que no ha dicho Jesús: «Sin mí no podéis hacer grandes cosas», sino: «Sin mí nada de cuanto os conduzca a la vida eterna podéis hacer.»

Leer más...

Hay que orar con humildad (III)

Posted by: Ioseph

San Felipe Neri 02 (02)
San Felipe Neri

Pongamos también mucho cuidado en no tener vanidad de nosotros mismos cuando vemos los pecados en que por ventura vienen a caer los demás; por el contrario, tengámonos entonces por grandes pecadores y digamos así al Señor: Señor mío, peor hubiera obrado yo si Vos no me hubierais sostenido con vuestra gracia.

Leer más...

Hay que orar con humildad (II)

Posted by: Ioseph

Niños Rezando 01 (01)

Es verdad de fe que sin la ayuda de la gracia de Dios no puede el hombre hacer obra alguna buena, ni siquiera tener un santo pensamiento. Así lo afirmaba también San Agustín: Sin la gracia de Dios no puede el hombre ni pensar ni hacer cosa buena. Y añadía el mismo santo: Así como el ojo no puede ver sin luz, así el hombre no puede obrar bien sin la gracia. Y antes lo había escrito ya el Apóstol: No somos capaces por nosotros mismos de concebir un buen pensamiento, como propio, sino que nuestra suficiencia y capacidad vienen de Dios.

Leer más...