La paz como fruto de la obediencia a Dios

Fragmento:

“Mucha paz tienen los que aman tu ley, y nada los hace tropezar.”

— Salmo 118, 165.

Reflexión:

La paz no es ausencia de dificultades, sino la serenidad interior que brota de una conciencia recta y de una vida vivida según la voluntad de Dios. Hoy, examinemos si hay algo que nos quita la paz, y pongámoslo en manos del Señor con sincera docilidad.


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