
Fragmento:
“He aquí este Corazón que tanto ha amado a los hombres… y en cambio no recibe sino ingratitudes.”
— Revelación del Señor a Santa Margarita María de Alacoque.
Reflexión:
El Corazón de Jesús sufre por la frialdad de muchos. La devoción verdadera implica consolarlo, amarlo, y ofrecerle reparación. Hoy, hagamos un acto de amor y de reparación, uniendo nuestras penas a su Corazón herido.