La humildad en las relaciones con el prójimo

Fragmento:

“Sed humildes, benignos, pacientes; soportándoos los unos a los otros por amor.”

— Efesios 4, 2.

Reflexión:

La humildad nos hace comprender y soportar con amor las limitaciones ajenas. Hoy, pidamos al Señor crecer en esta virtud y practiquemos la paciencia, especialmente con quienes nos resultan más difíciles de tratar.

El Corazón de Jesús y la devoción reparadora

Fragmento:

“Considerad cuán grande es el deber de la reparación, tanto por las ofensas que se hacen a Dios como por los beneficios que no se agradecen.”

— Papa Pío XI, Miserentissimus Redemptor, 1928.

Reflexión:

Reparar es amar por quienes no aman, agradecer por quienes olvidan, adorar por quienes desprecian. Hoy, ofrezcamos con amor nuestro trabajo, nuestras penas y nuestras oraciones en reparación al Sagrado Corazón.

La fuerza del amor reparador

Fragmento:

“Un solo acto de amor puro es más agradable a Dios que todas las demás obras juntas.”

— San Juan de la Cruz, Dichos de luz y amor, nº 61.

Reflexión:

El amor, cuando es sincero y puro, repara las ofensas y consuela al Corazón de Cristo. Hoy, hagamos un acto de amor oculto y generoso: un sacrificio, un silencio, un servicio, ofrecido solo por Él.

La dulzura de la caridad verdadera

Fragmento:

“La caridad es paciente, es benigna; no se irrita, no busca lo suyo.”

— 1 Corintios 13:4-5.

Reflexión:

La caridad no se contenta con evitar el mal: busca el bien del prójimo con dulzura y generosidad. Hoy, procuremos practicar la caridad en las cosas pequeñas, con un gesto amable, una palabra alentadora, un silencio oportuno.