El valor de las pequeñas cosas

Fragmento:

“Fidelidad en lo poco, para ser puesto sobre lo mucho.”

— Cfr. Mateo 25, 21.

Reflexión:

La santidad se teje en lo cotidiano: un deber cumplido, una palabra amable, un sacrificio escondido. Dios ve lo que el mundo ignora, y premia con abundancia al que es fiel en lo pequeño, porque ahí se prueba el amor verdadero.

El amor que edifica

Fragmento:

“La ciencia hincha, pero la caridad edifica.”

— Cfr. 1 Corintios 8, 1.

Reflexión:

El conocimiento es un don, pero si no está unido a la caridad, se convierte en orgullo. La caridad, en cambio, genera vínculos y edifica la comunidad. Amar es edificar en los demás la imagen de Cristo, y dejar que ellos la edifiquen en nosotros.

La oración perseverante

Fragmento:

“Es necesario orar siempre, y no desfallecer.”

— Cfr. Lucas 18, 1.

Reflexión:

La oración es el respiro del alma. Perseverar en ella, incluso cuando parece que el cielo calla, es prueba de amor. Dios escucha siempre; a veces retrasa su respuesta para purificar nuestro deseo y aumentar nuestra fe.